Momentos y personas: la vida

domingo, 15 de marzo de 2015

La vida es un viaje. Un viaje muy corto, por más que no seamos conscientes. Y eso en cierta medida es bueno; sería tan difícil el día a día si lo fuéramos... El esfuerzo, los problemas, el desánimo haría mella en nosotros, no nos permitiría ni tan siquiera disfrutar de los buenos momentos. 

No obstante, hay situaciones en las que este viaje se hace tan difícil... Las palabras no sirven, y los sentimientos son enormes, sobrecogedores, nos paralizan y nos superan. Nos llenamos de rabia y de dolor, de repente el peso de las emociones es inmenso, llegamos a creernos incapaces de seguir adelante. No hay consuelo, solo esa opresión en el alma que lo llena todo.

Pero la vida sigue, como canta Sabina y hemos recordado aquí, "como siguen las cosas que no tienen mucho sentido". A lo largo del camino hemos ido rodeándonos de personas en las que apoyarnos, familia y amigos que hemos convertido en familia. Qué importante es tenerlos, cómo sin apenas darnos cuenta, están a nuestro lado, en silencio, sirviendo de bastón y de fuerza cuando la nuestra flaquea; viéndonos llorar y abrazándonos, sin más. Estando.

Muchas veces damos por hecho que siempre estarán, y demasiado a menudo no sólo no les prestamos atención, sino que descuidamos su afecto. Dar por sentado a quien nos quiere es un tremendo error; siempre he dicho aquí que la vida es una colección de momentos, pero también de personas. Nuestros momentos y nuestras personas.

Como decía al principio, es imposible vivir la vida como si cada día fuera el último. Pero sí podemos hacer algo que los que estamos en esta aventura del "en ese momento del día", creo que estamos llevando a la práctica, o al menos intentándolo. Y es disfrutar nuestros momentos. Cuidar los sentimientos y a las personas que nos quieren. Con pequeñas cosas. Un te quiero a destiempo, una llamada cuando no se espera, un mensaje en mitad del día...No vamos a dejarlo para más adelante porque no tenemos tiempo, porque estamos ocupados; tres segundos bastan para hacer sentir especial a una persona. Vamos a agradecer lo que hacen por nosotros, aunque sea tan cotidiano que se ha convertido en rutina. Vamos a hacer de la vida un lugar bello, con sus momentos amargos pero siempre con la mirada puesta en los nuestros.

Y hoy, más que nunca, vamos a recordar lo bueno. No quiero llorar ni que nadie llore, quiero que las personas a las que muy especialmente dedico esta entrada, esbocen una sonrisa, cierren los ojos y piensen en un momento en el que esa persona nos hizo reír. Yo lo estoy haciendo ahora mismo. 

Por último, os dejo con un poema atribuido a Benedetti (parece ser que erróneamente) que para mi, siempre, y más que nunca en momentos así, es LA ESPERANZA. Así, con mayúsculas y levantando la voz, la mirada y el alma.


"No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras,
enterrar tus miedos,
liberar el lastre,
retomar el vuelo.

No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros
y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda,
y calle el viento,
aún hay fuego en tu alma
aún hay vida en tus sueños.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo.
Porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.

Abrir las puertas,
quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron,
vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa,
ensayar un canto,
bajar la guardia y extender las manos
desplegar las alas
e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos.

No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños

Porque cada día es un comienzo nuevo,
porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero."

12 comentarios:

  1. Hoy se hace muy difícil comentarte pero a la vez es inevitable, no sólo por la razón que llevas en lo que escribes sino por la carga emocional que tienen tus palabras. Efectivamente a lo largo de nuestra vida nos encontramos con personas especiales y con algunas de ellas hemos tenido la gran suerte de crecer. Disfrutemos y alimentemos las relaciones con esas personas porque de ellas nos quedará lo único que nadie ni nada nos puede arrebatar: los recuerdos. Mucho ánimo para aquellos que pasan por uno de los peores momentos de la vida. Y gracias por tu momento. Bsz

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    1. A ti por tu comentario, que como siempre, consigue conmoverme.

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  2. Imposible no emocionarse con esta precisa descripcion de esta vida de continuas dicotomias..aunque siempre sabes marcarnos un rumbo, una direccion,..una ESPERANZA.
    Gracias por mostrarnos caminos.
    Enhorabuena

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    1. Gracias a ti por leerme y por captar lo que trato de transmitir y ponerlo en palabras.

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  3. Muy pocas veces las palabras que se escriben, las palabras que se leen, las palabras que se escuchan, muy pocas veces logran explicar los sentimientos más profundos, los más tristes y los más alegres.
    Esta es una de esas veces. Sé que tus palabras acarician y ayudan a quien ahora más lo necesita.
    Un beso.

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    1. Es una suerte contar con tus comentarios, que no sólo me emocionan sino que consiguen que me sienta aún más feliz con lo que hago. ¡Gracias a los dos!

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  4. Gracias por transmitir con tus palabras sentimientos tan íntimos . Y por hacernos disfrutar de Benedetti . Es difícil , como dices, ser conscientes de lo corto que es el camino. Ser conscientes de lo importante , de lo realmente importante . Necesitamos perder algo o a alguien para valorar lo necesario que era para nosotros . Y es cuando más cerca está el final del trayecto cuando nos damos cuenta lo corto que ha sido el camino. La vida está llena de despedidas y muchas de ellas sin ser conscientes de ello ¿Cuántas veces nos hemos acordado de esos amigos con los que hemos jugado al balón en el patio del colegio? ¿ de ese amigo de instituto con el que perdimos el contacto simplemente por dejadez ? ¿De esa novia de juventud que nos hizo descubrir el amor ? ¿Esas Navidades con la familia al completo, pequeños y grandes ,en un pequeño salón? Esos "momentos" ,de una forma u otra , los finalizamos nosotros .Y de ellos queda tan sólo un RECUERDO.
    Por eso, como bien dices , cuidemos a las personas que nos quieren , a las que forman o han formado parte de esos momentos de nuestra vida. Hay despedidas que no podemos evitar ,muchas que si son posible retenerlas y otras , las que forman parte de ese RECUERDO, que pueden, (¿por que no?) volver a formar parte de nuestros momentos del día .

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    1. Cada vez tengo más claro que un valor añadido y un elemento más de este blog son vuestros comentarios. Lo hacéis vuestro, lo completáis y en definitiva le dáis sentido. Me ha encantado la última frase; me la apunto y forma parte ya de mis momentos. ¡Gracias!

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  5. En este "momento" tan emotivo nos emocionas sobremanera con tus reflexiones sobre la vida, que unas veces nos premia con momentos dichosos y otras nos golpea sin contemplaciones; pero lejos de regocijarte en la pesadumbre, abres un resquicio a la ESPERANZA y sobre todo a valorar a las personas que queremos y que nos quierenuy q son nuestro mayor tesoro.
    Un abrazo P.T

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    1. P.T, ya te echaba de menos!! Gracias por tus palabras

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  6. Imposible no emocionarme, imposible que no se me saltasen las lagrimas e imposible también que no salíese una sonrisa. Un abrazo grande!

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